En el mundo existen alrededor de 4000 especies de moscas de la fruta; de estas, aproximadamente 20 especies son plagas de importancia económica, dentro de ellas destacan los géneros Anastrepha, Rhagoletis, Dacus, Toxotrypana y Ceratitis.
El género Anastrepha constituye el grupo más diverso de todos los tefrítidos nativos de América con 185 especies descritas a la fecha (Hernández-Ortiz y Aluja, 1993).
Se han formado por lo menos 18 grupos de especies (Norrbom, 1985), esta clasificación se sustenta en un análisis morfológico que incluye características estructurales y de patrones de coloración del cuerpo, así como características de las genitalias en ambos sexos.
Los trabajos taxonómicos sobre Anastrepha se inician con Hendel (1914) quien reconoce 33 especies. Stone (1942a, 1942b), prepara su obra basada fundamentalmente en hembras, incorporando nuevos caracteres morfológicos de valiosa relevancia taxonómica.
Baker et al. (1944), Foote (1967), Korytkowski y Ojeda (1968), Korytkowski (1974), Steyskal (1977a, 1977b), Hernández y Tejada (1980), Norrbom y Kim (1985), Hernández (1987) y Norrbom (1989, 1991), han realizado diversas contribuciones al mejor entendimiento taxonómico del género Anastrepha.
La contribución mas extensiva y reactualizada corresponde a la clave preparada por Steyskal (1977b), que permite la identificación de 150 especies reconocidas hasta esa fecha, basada en ciertos caracteres fundamentales de las hembras (Korytkowski, 1993).
Muchas plagas tienen distribución restringida pero algunas son invasivas
Prevenir su dispersión es la mayor preocupación de algunos países o agencias reguladoras
El comercio global incrementa las oportunidades para que las plagas se dispersen, es muy importante entre los países ayudarse para evitarlas.
